Sé Consciente de tu Cuerpo.
Llevaremos la atención al cuerpo, priorizándolo en lugar del ejercicio que vamos a realizar. Los ejercicios son una herramienta para llegar a la esencia del sentir. Ese estado de atención es la base para toda la práctica.
Fomentando la Base.
Para este segundo ejercicio, trataremos de fomentar y activar la base. Tómate tu tiempo y realiza las repeticiones que necesites. Intentaremos realizar los ejercidos desde un estado de plena atención, para poder darle a nuestro cuerpo lo que necesita a cada momento.
Estabilidad y Alineamiento.
Pondremos plena atención en el ejercicio, sin perder la conciencia en la globalidad del movimiento del resto del cuerpo. La respiración nos ayudará a mantener la estabilidad de la pelvis y la alineación de la caja en todo momento.
Control y Movimiento.
Buscaremos la comodidad y el control en el movimiento, simplificándo al máximo el ejercicio para seguir siendo consciente de nuestro cuerpo. No se trata de cantidad sino de calidad.
Elevación y Proyección del Movimiento.
Es un ejercicio intenso, elevaremos y alargaremos el movimiento lo máximo posible creando espacio en nuestro cuerpo, la respiración es fundamental. No crees tensión en el cuerpo y adapta el ejercicio si lo necesitas.
Atiende al Cuerpo en su Globalidad.
Recuerda que no se trata de hacerlo bien, sino de atender al cuerpo en su globalidad. Sé consciente de la unidad de tu cuerpo. No te pierdas en el movimiento del ejercicio.